Cierra los ojos y disfruta planificando tu encuentro erótico sexual…
Siendo la sexualidad una de las actividades más placenteras es a la que menos momentos le reservamos en la agenda y a la que menos cuidamos y mimamos.
Como ya indicábamos en otras ediciones: …igual que planificamos un fin de semana en la playa o en la montaña, y preparamos todo aquello que entendemos necesitaremos para que sea estupendo, así también podemos y deberíamos hacer con nuestros encuentros sexuales. Planificarlos, cuidar todos los detalles, preparar todo aquello que nos gusta y con lo que sabemos que disfrutaremos. Un encuentro sexual, no tiene porque ser diferente en cuanto a su planificación, aunque sí lo sea en los elementos que preparemos. Si no lo han hecho nunca, están a tiempo. El sentido del ridículo, las vergüenzas varias y los prejuicios ya gastados, déjenlos para otros momentos menos placenteros que el que nos ocupa.
Algunas sugerencias a tener en cuenta en los encuentros erótico sexuales.
- Elección del día: esto es importante. Debéis confrontar agendas, buscar y encontrar un día de la semana en el que podáis reservar al menos dos o tres horas sin interrupciones de niños, trabajo, teléfonos, etc. (lo deseable sería toda la tarde). La sexualidad, vuestra sexualidad, merece buscar y encontrar un día a la semana para pasarlo bien juntos.
- Lugar: donde las posibilidades económicas o familiares os lo permitan. En vuestra casa, hotel, etc. Debe ser una habitación agradable, con cama, o algo similar, lo importante es que sea cómodo.
- El ambiente: debe cuidarse al detalle, con todos aquellos elementos que a los dos miembros de la pareja os resulten eróticos: una iluminación cálida, música de ambiente, aromas y buena temperatura.
- Aceites para acariciar: reservar aceites o esencias para acariciar el cuerpo de vuestra pareja es una delicia que desearéis repetir.
- Indumentaria: utilizar prendas sugerentes, sensuales, si es preciso y la economía lo permite. Comprar algo para el momento, si no es posible sólo hay que erotizar lo que os pongáis.
- Apagar el móvil, descolgar el teléfono fijo, y desconectar el timbre de la puerta: es importante eliminar todo aquello que pueda perturbar vuestro momento de placer, ese que habéis preparado de manera especial. Quien esté al otro lado del teléfono o de la puerta, seguro que puede esperar.
- Actitud física y psíquica: procurar estar lo más despejados posible, descansados, con la digestión hecha (que podáis moveros libremente sin sentir pesadez); las preocupaciones o el estrés dejarlos en la puerta.
- Las caricias: es importante tomarse tiempo para disfrutar de los cuerpos desnudos. Olvidarse del coito, centrarse en las caricias y en la piel de vuestra pareja, desde la cabeza y hasta la punta de los dedos de los pies. Con las manos, con la boca, con el pelo, con el cuerpo…La geografía corporal es maravillosa, tenemos mucha piel para mimar sin tocar los genitales.
- Vivir el placer de recibir y de dar: sin ansiedad, ni culpas, sin responsabilizar a la pareja del propio placer. Disfrutar siendo activos o pasivos, sin pensar quien toma la iniciativa.
- Tener la mente en “clave erótica”: la mente debe estar ocupada con pensamientos o imágenes eróticas que sirvan de estímulo. Cuando la mente está preocupada por el desempeño sexual o distraída en otras cosas la respuesta sexual no funciona, se inhibe. No lo olvidéis.
Otros aspectos a tener en cuenta:
- El aliento: Si la boca no sabe bien, no huele bien, no puede haber encuentro sexual satisfactorio, placentero. El mal aliento, acaba siendo un inhibidor del deseo sexual. Es fundamental y necesario que cuando estás con la persona amada, deseada, el olor que salga de tu boca al hablar, o respirar, sea lo más deseable y agradable posible, debe querer y desear besarte. Si esto no es así, malamente se va a desarrollar ese encuentro, que tendrá de todo menos de erótico. Si has comido queso roquefort, por mucho que sepas que a ella le gusta, quítate de la cabeza que le gustará al besarte. Pongo de ejemplo el queso, pero extrapólalo a cualquier alimento o bebida (café, zumo de tomate, etc., etc.). El aliento también se resiente cuando no se ha comido y el estómago está vacío, o al levantarse por las mañanas. Esto es muy fácil de evitar y solucionar: lávate los dientes después de comer, siempre y si no llevas cepillo, los enjuagues bucales o los caramelitos refrescantes son estupendos, ocupan poco y dan buenos resultados, llévalos siempre. Si tu boca huele bien, sabrá mejor y será más deseable.
- Olor corporal: la ducha diaria es un imperativo para una sexualidad placentera, aunque haga frío, no tengas tiempo, etc., etc. Hay que pasar por agua y jabón todos los días, y antes de una relación sexual ducharse nuevamente, la piel no se desgasta. Si tu cuerpo huele bien resultará apetecible, se podrá besar y lamer. Merece la pena no perdérselo.
Todas estas sugerencias que he reseñado más arriba, son elementos que aunque todas las personas decimos conocer, también muchas olvidan, pensando eso de que la sexualidad debe ser espontánea. Pues teniendo ya todos claro que la sexualidad debe dejarse lo menos posible a la naturalidad, cuidemos nuestros encuentros eróticos, los disfrutaremos más, y nuestra pareja también.
Esto no garantiza que tengáis orgasmos estupendos, ni tan siquiera que lleguéis al clímax los dos, pero si será un paso para vivir vuestra sexualidad de manera diferente, disfrutando los dos.
Fdo.: Raquel Díaz Illescas.