Cierra los ojos y
date permiso para abandonarte ¿me sigues...?
Hablar de las fantasías sexuales a las mujeres que
se masturban habitualmente o lo han hecho en algún momento de su vida, y
conocen lo que es llegar al clímax es realmente sencillo el hacerlo, pero ¿cómo
explicárselo a una mujer que nunca se ha masturbado y desconoce lo que es tener
un orgasmo?
¿Cómo hacerle entender que lo que imagina en su
mente y le da placer nada tiene que ver con sus “deseos terrenales”?
¿Cómo enseñarle a una mujer a “cultivar fantasías?
Podemos hacerlo y de hecho lo hacemos en consulta.
Lo primero es empatizar con ella. Probablemente,
aunque haya oído hablar de las fantasías sexuales desconozca al menos tres
aspectos importantes que nosotros como profesionales debemos tratar de explicar
sin prisa y con la premisa de que se lo estamos contando a alguien que nunca se
ha masturbado o no ha hecho uso de ellas. Tres cuestiones “clave” a dar
respuesta:
- qué son,
- para qué sirven
- Cómo aprender a fantasear.
¿Qué son las fantasías sexuales?
Es importante que tengas claro que
las fantasías, fantasías son. Nada tienen que ver con lo que tú deseas en
tu realidad, en tu día a día, en y para tus relaciones sexuales. Al principio
esto puede resultar difícil de entender pues lo que nos venden en la gran
pantalla y luego escuchamos en la calle es que son “deseos ocultos o
frustrados”. Esto forma parte del imaginario cultural. El sentimiento de culpa estará
encantado de abrazarse a ti y no soltarte si se lo permites, y no se lo vamos a
permitir ¿verdad?.
Las
fantasías sexuales son representaciones mentales creadas por el inconsciente.
Se producen de manera voluntaria o involuntaria en nuestra mente. Las imágenes, ideas o sentimientos que
la mente produce generan en la persona una
emoción y una excitación, sexual. Aunque no suelen ser tema de conversación, son muy
comunes; para muchas personas son causa de sentimiento de culpa, sin embargo, son
inofensivas y pueden hacerte pasar momentos estupendos.
Hombres
y mujeres fantasean al mismo nivel, la diferencia es que ellos hablan de éstas
con menos pudor y generalmente los temas
difieren; así mismo las fantasías de las mujeres suelen ser más elaboradas que
las de ellos.
Las
fantasías sexuales se encuentran en nuestra imaginación, por lo que si se
llevasen a la práctica es muy probable que perdieran el efecto estimulante. Hay
que tener en cuenta que nuestra mente se deja llevar por la capacidad
creadora de quien las evoca, sin escatimar en detalles. La realidad puede ser
estupenda, pero seguramente imposible de realizar como nosotras lo hemos
imaginado en nuestra fantasía.
Y
es que las fantasías sexuales se oponen a la naturaleza del ser humano, a las
creencias y a la escala de valores de quien fantasea. Las aceptamos
precisamente porque están en nuestra imaginación, solo allí, y allí es donde
deben estar.
Seguro que
estáis deseando que os cuente algunos ejemplos de lo que hemos hablado.
¿Cuáles
son las principales fantasías femeninas? ¿Con qué fantasean las mujeres?
Seguiremos…
Si quieres leer el post anterior
Si quieres y te apetece, contesta este cuestionario….
Cuestionario para ELLAS: ¿Qué les pone a las mujeres entre las sábanas?
Fdo.: Raquel Díaz Illescas