Duele la
tripa, duele el estómago, los ojos, el sexo, duelen los dientes, duele el corazón…
Más que las actitudes o comportamientos que no
debemos tener para esto o aquello, yo prefiero hablar sobre lo que “nos es
favorable”. Estoy convencida que hablar en positivo rentabiliza nuestras
acciones, pero en este caso vamos a hacer una excepción y vamos a hacer un
“mix”. Daremos unas pinceladas sobre aquellas cosas que no son recomendables
hacer cuando nos encontramos en un proceso de desvinculación.
Las individualidades, individualidades son, de
manera que intentemos no coger el rábano por las hojas.
Desvincularse no es fácil, esto lo sabemos, pero no
lo tenemos interiorizado. Además de no ser fácil, duele. Produce sufrimiento y
en la mayoría de las ocasiones provoca conductas de “búsqueda”
de la persona amada. Nadie que
ame está libre de pasar las fases de este proceso, aunque podemos intentar que
sea lo menos doloroso posible.
Te doy 10 tips que debes tener en cuenta si estás en
un proceso de desvinculación amorosa:
1.
Una mancha tapa otra mancha:
no es cierto. Es verdad que cuando se está en un proceso de desvinculación, hay
momentos y días en que la necesidad de la persona amada es tan grande y tan
intensa que uno intenta calmarlo a cualquier precio y busca otros brazos, otros
labios y otro cuerpo donde olvidar a la persona amada, Sin embargo, como un bumerán vuelven los recuerdos y las
comparaciones. Porque debes tener en cuenta que a no ser que tu ex pareja no
mereciera nada la pena (que en este caso cualquiera será mejor) lo más normal
es que el recuerdo de esa persona venga con más fuerza y el dolor se
acentúe. ¿Con esto quiero decir que no
te acuestes con nadie? No. Solo que seas consciente que o la persona que te
abraza entre las sábanas supera muy por encima a quien para ti era tu chica o
tu chico, o te sentirás hecho una mierda. Sugerencia: cuando te acuestes con
alguien, que te guste y si es posible que estés sobrio.
2.
Está en línea:
El whasapp es el mayor destructor de estómagos en los procesos de
desvinculación. Antes la tentación estaba en llamar por teléfono, ahora está en
ver si está en línea”. De manera
compulsiva y automática los dedos se deslizan sobre su nombre y los ojos solo quieren
ver la palabra mágica: “en línea”. Paradójicamente, estar en línea o no, no
siempre se vive de manera positiva o negativa.
Es una gran tentación eso de mirar para ver si habla o lo hace durante
mucho tiempo, aunque cuando se ama lo que uno mira no es para “controlar” estas
cuestiones, sino para sentir que en ese mismo instante está ahí y tú crees que cuando
le ves él también te está mirando. Y a veces esto es cierto, pero no siempre es
así. ¿Tienes forma de saberlo? ¿Para qué te sirve hacer esto? sugerencia:
es duro y difícil, ya empezábamos diciéndolo.
Elimina su conversación. Sí, sé que puedes seguir entrando, pero te
costará un poco más y cuando entres en tu whasapp no verás su imagen. Y si no quieres que él o ella se ponga en
contacto contigo, y te sientes con
fuerzas: bloquéalo, pero esto tiene sus pros y sus contras. ¿Cuánto tiempo
serás capaz de tenerlo bloqueado?
3. Redes
sociales: Otra de las tentaciones negativas. Su Facebook,
Twitter o cualquier otra red social
donde él o ella pueda estar no debe ser un sitio de peregrinación para ti. Sugerencia:
lo ideal sería que lo elimines de tus amigos. Sí, aunque le quieras, aunque sea
buena persona y todos los “aunques” que se te vengan a la boca. Ahora lo
importante eres tú. Cuando estés fuerte nuevamente, que lo estarás, podrás
rescatarlo otra vez.
4.
Hablar de él o ella:
En los primeros días, y a veces semanas, es altamente tentador hablar de la
persona amada con otras personas cuando nos sentimos mal, ya que de alguna
manera necesitamos traerla a nuestro lado y convencernos de que lo que ha
ocurrido era lo mejor, o quizá escuchar que nos digan que seguro que volveremos
a estar juntos. Necesitamos calmar el dolor que sentimos por la ausencia y todo
lo que nos haga sentir mejor lo acogemos. Sugerencia: habla hasta que te
hartes los primeros días (no digo semanas) luego aunque te apetezca hablar de
ella, cuando vayas a quedar con alguien, ten en mente algunos temas de los que
puedes hablar, que no sea el dolor que sientes y lo mucho que la echas de
menos. Hablar de la persona que aún amas reforzará y estimulará el amor que aún
sientes por ella. ¡Puedes hacerlo!
5.
Ir a sitios que has compartido con
frecuencia con él o ella:
¡Error! La costumbre y el hábito nos lleva a acudir a sitios donde íbamos con
nuestra pareja, unas veces por inercia y
muchas por el deseo de encontrarse con ella. Sugerencia: Esto es
evitable. Hay muchos sitios donde puedes ir que no sean a los que ibas con tu
ex. Antes de salir piensa dónde vas a ir. Mira en internet locales
nuevos que hayan abierto, da igual el sitio. Nunca te plantes en la
calle sin saber el destino. Avisa a tus amigos de este cambio.
6. Que
los demás te den información de él o ella: Muy
tentador, lo sé. Los primeros diez segundos crees que eso te calma, e incluso
te gusta, pero pronto comprobarás el malestar que sientes. No olvides que es
como una droga, de las duras y sus efectos son muy similares. Sugerencia: Avisa a tus amigos de que
no quieres que te den ningún tipo de información de tu ex, por muy suculenta
que sea…No te hará bien, nunca.
Reflexiona esto.
7.
Planificar, organizar, etc.:
Es difícil aceptar e interiorizar que tu vida debe seguir sin él o ella. Es difícil y además duele. Cuando tenemos algún evento, actividad o por
ejemplo las vacaciones, las seguimos imaginando con ella. Es momento de empezar
a soltar. Sugerencia: a partir de aquí, cualquier actividad que vayas a
hacer, piensa con quien lo harás, tu ex está fuera de la lista. Posiblemente
tendrás que hacer algunas pequeñas variaciones
en tu planificación, pero nada que no se pueda solucionar con
imaginación y ganas (ambas se pueden trabajar).
8.
Traer a la memoria:
recordar conversaciones habladas, revisar las del whasapp, pensar en los momentos compartidos, sus besos, sus abrazos,
sus cuidados, sus afectos, sus caricias y las tuyas entre las sabanas…Todo esto
es peligroso, de alto voltaje, máxime si para ti fue especial e importante. Es
tan grato recordarlo como doloroso. Sugerencia: cuando sientas que estos
pensamientos se empiezan a deslizar en tu mente, páralos. Levántate y Ponte a hacer otra cosa. Pon
música por ejemplo, pero no balada…
9.
Fantasías sexuales: Ni
en tus fantasías debes acogerle o acogerla. Hay muchos hombres y mujeres
estupendas, maravillosas, malvadas o malvados, canallas o como las quieras para
que te erotices. Sugerencia: antes de empezar piensa quien será “la o él
agraciado de tus perversiones”.
10. Sentirse
culpable: Sentirse culpable no hará sino alimentar y prolongar este duro
proceso. Ha dejado de quererte, no eres la persona que quiere para su vida, ha
encontrado a otra o a otro… da igual, el caso es que no quiere seguir contigo,
o eres tú quien ha decidido no continuar vuestra relación. Esto conlleva asumir, que no quiere decir
entender, que vuestra relación no es posible. Sugerencia: la culpa es una gran mochila que pesa
demasiado para caminar con soltura, si no vas liberando peso llegará un momento
que no veas nada más que el barro de tus zapatos. El sol sale todos los días,
te lo aseguro.
El problema de siempre: “el
listón está muy alto”. Pues si, posiblemente si, pero es que quizá no le
necesites tan alto, ¿o si? Si es así búscalo.
Si te encuentras en un tiempo
de reflexión, estas sugerencias, al menos no todas son para ti. Tampoco para
quienes tienen dudas. Estas sugerencias son para quienes saben que deben
desvincularse, y aunque esto se dude, sabemos cuándo debemos hacerlo, de manera
que dejo a tu buen criterio e inteligencia saber si esto es para ti o no, pero guárdalo,
quizá algún día te sirva.
Fdo.: Raquel Díaz Illescas.
Fdo.: Raquel Díaz Illescas.
Muy interesante. seguiré leyendo tus posts!
ResponderEliminarUn saludo!