Si han
dejado de quererte, amarte o desearte.
Si no
te respetan, valoran y cuidan.
Si tus
opiniones son motivo de conflicto y huida.
Si
dejas de compartir para llenar tus planes de interrogantes.
Si la
verdad está impregnada de mentiras.
Si golpean
tus emociones con indiferencia.
Si te dejan
las palabras y se bloquea tu verbo.
Si el
silencio abraza tu almohada.
Si tu
cama se hace demasiado grande y el amor demasiado pequeño.
Si tu
dolor se transforma en sufrimiento.
Si solo
te miran y te escuchan cuando sonríes y regalas palabras maquilladas.
Si te
abandonan en tus días grises, si no cogen tu mano cuando se enfría y abrazan tu
cuerpo cuando está perdido.
Si
dejas de ser una prioridad para ser una alternativa.
Si te
dejan ir.
Si el reproche
dibuja su boca y al perdón se le olvidan las vocales.
Si te
buscan cuando se sienten solos y no cuando no tenerte es sentirse aislado.
Si dejas
de ser quien quieres ser para ser quien quiere, cariño que corra la fila que
algo mejor seguro encuentras en ella.
Fdo.: Raquel Diaz Illescas
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