martes, 29 de septiembre de 2009

Características del modelo capitalista permisivo: modelo imperante

Una de las causas que más influyen en las disfunciones sexuales, es la socialización producida por los modelos socio-sexuales, en concreto por el modelo “Capitalista Permisivo”.

Este modelo tiene unas características muy claras, conocerlas, contribuirá a que los encuentros sean gratificantes para ambos miembros de la pareja.
Las consecuencias de este modelo ideológico, dominante en la actualidad, y los intentos por adecuarse a él sobre todo en la mujer, podemos decir que son varias:

- En este modelo, como en los que comentamos en el articulo anterior, se entiende que el coito debe ser el centro de la vida erótica de las parejas. Las relaciones no coitales, y sobre todo las que no incluyan estimulación de los genitales, son consideradas “poco importantes”, o no se consideran parte de la sexualidad a menos que se hagan como un medio para llegar a los genitales, lo que conlleva que las posibilidades de que la mujer llegue al orgasmo se limitan considerablemente, ya que la vagina no es precisamente el sitio donde reside el mayor número de terminaciones nerviosas, pero de esto parece que aún no se han enterado los hombres, como tampoco algunas mujeres.

- En este modelo, la mujer aparece como despojada de su propia erótica, teniendo sentido cuando es gozada con la pareja. Esto es el resultado de las ideas transmitidas sobre la sexualidad, tanto a hombres como a mujeres, lo que favorece negativamente, el conocimiento de su sexualidad. Llevada por esta ideología, la mujer se despreocupa de su sexualidad, especialmente de la más genital, pensando que será su hombre ideal el que sabrá como despertar en ella su erótica. Llevada por esta creencia, muchas mujeres desconocen sus genitales, la anatomía de los mismos y las sensaciones que producen.

- Un número considerable de mujeres no se ha masturbado nunca, o bien descubren la masturbación a edades relativamente tardías en comparación con la edad de inicio de los varones. Esta parece seguir siendo una práctica de los hombres o de mujeres demasiado desinhibidas o que no tienen pareja.

- Sin embargo, un número elevadísimo de mujeres, desconocen que es más sencillo para las mujeres tener orgasmos con relaciones no coitales (que conlleven estimulación del clítoris) que con relaciones coitales, habiendo practicado o no la masturbación a solas.

- Muchas mujeres fingen tener orgasmos en sus relaciones coitales (más de las que muchos creen), por temor a hacerle daño o preocupar a su pareja, llegando a los encuentros sexuales unas veces “por que toca”, otras por complacer a su pareja, y en muchas ocasiones para evitar conflictos.

- Lo que se espera y propicia en la mujer, y lo que muchas mujeres asumen, es normalmente un rol pasivo. En la relación erótica ha de tener una actitud de espera. Ella no participa activamente en la relación erótica (con el desconocimiento que esto supone, en muchos casos tampoco sabría como hacerlo). Esta actitud, acaba muchas veces siendo entendida por el otro miembro de la pareja, como algo connatural a todas las mujeres, sumándose esto a la gran lista de errores aprendidos.

Afortunadamente cada vez son más las mujeres que disfrutan de su sexualidad sin responsabilizar a su pareja de haber llegado o no al clímax, y cada vez son más los hombres que saben que el clítoris no es “el florero” de los genitales femeninos.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Los Modelos socio-sexuales: capitalista permisivo (1)

Conocer los modelos que han regido el comportamiento sexual de nuestr@s abuelos y abuelas, madres y padres en épocas pasadas, nos ayudará a entender cómo han sido las ideas y los conceptos sobre sexualidad transmitidos de generación en generación, y que en nuestros días, son el origen de nuestras propias ideas y concepciones al respecto.

El comportamiento de la sociedad española en épocas pasadas, y no tanto, estaba guiado por modelos de conducta erótica, que regían el comportamiento de hombres y mujeres. En un estudio llevado a cabo en España sobre sexualidad, por el ya fallecido sociólogo y escritor Josep Vicent Marqués, estableció tres modelos sexuales que han formado parte de una época, y siguen viviendo aún en nuestros días.

1. El modelo clerical-represivo, dominante a lo largo del siglo XIX. La fuerte influencia de la moral religiosa, hace que la idea dominante sea que la erótica es un instinto negativo del que hay que defenderse a toda costa. Este modelo, asocia enérgicamente la erótica a lo genital y lo reproductivo. La mujer carecía de cualquier erótica. Su función era la de ejercer de buena esposa y madre.

2. El burgués- tradicional, dominante a finales del XIX y principios del XX. Se caracteriza por la “doble moral” Los contactos eróticos serán aceptables, o perniciosos, dependiendo quien los practique, si es un hombre, o una mujer. La erótica se sigue identificando y focalizando fuertemente en lo genital.

3. El modelo capitalista-permisivo, el dominante en la actualidad. Se reconoce al fin, la sexualidad de la mujer. A este modelo dedicamos las líneas que siguen…
Como hemos podido ver, a lo largo de la historia, la sexualidad, la erótica, ha sido territorio exclusivo de los hombres, y también ha recaído en ellos la injusta responsabilidad de hacer llegar al clímax a su pareja.

Los condicionantes socio-económicos que acontecieron al final de la II Guerra Mundial, propiciaron la aparición de un nuevo modelo sexual, llamado capitalista permisivo, hecho que no supuso la desaparición de los modelos imperantes en aquel momento, ya que estos han ido coexistiendo con el dominante en nuestros días,

A pesar de que ha habido una importante revolución sexual en las últimas décadas, todavía hoy nos seguimos moviendo por modelos sociales que dificultan que las relaciones amorosas se vivan de manera placentera en la pareja.

La idea actual que tenemos de la sexualidad, es que ésta es una parte esencial del ser humano. Pero aún hoy, la sexualidad gira en torno al coito. Es verdad que al fin se ha reconocido la existencia de la erótica femenina, así como el reconocimiento de la importancia de desarrollar una vida sexual satisfactoria y plena, tanto en el hombre como en la mujer, considerándose que los encuentros eróticos son una parte esencial en la convivencia y la relación de las parejas.
Se reconoce que tanto el hombre como la mujer, pueden sentir deseo erótico, y disfrutar de su sexualidad. Ahora bien, aún admitiendo que la mujer posee erótica, ésta sigue sin ser poseedora de ella, es una faceta que tiene, pero que ha de despertarle su pareja. El papel del hombre ha cambiado con respecto a los modelos culturales anteriores (burgués-tradicional): se sigue valorando su supuesta potencia, pero ahora lo importante no es la cantidad de relaciones, sino la calidad de las mismas, ya que de él se supone que depende la satisfacción de su pareja, y su valoración como amante reside precisamente en dicha satisfacción.

En este modelo el hombre pasa a ser una especie de “trabajador cualificado” en lo referente a la sexualidad, que se convierte en una tarea en la que además de su disfrute, ha de conseguir el máximo goce de su pareja.

En muchas ocasiones el placer obtenido por la mujer en la relación erótica, es considerado como una especie de reconocimiento a su pericia y valor como amante. Tod@s conocemos ese dicho absurdo, que tanto daño ha hecho al disfrute de la sexualidad: “No hay mujeres frígidas, sino hombres inexpertos”, es la frase que mejor representa la ideología de este modelo. Es verdad que esta creencia, ha traído consigo algunos avances y también algunos problema, conocer su origen nos ayudará a relacionarnos mejor con nuestro cuerpo y el de nuestra pareja.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Beneficios de la masturbación

La masturbación es un acto natural, placentero y saludable.

Durante mucho tiempo la masturbación ha sido un tema tabú, y aún hoy, muchas personas se sonrojan y violentan al nombrarla. Esta negativa a un hecho natural en el ser humano, fue generando falsos mitos como que conducía a la idiotez o a la locura, o que era una práctica propia de jóvenes inmaduros, y que llegada a la madurez esto cesaría y se convertirían en hombres serios y responsables de su sexualidad…

Después de atribuirle todos los males habidos y por haber a eso de darle gusto al cuerpo, se ha demostrado que la masturbación tiene cabida en una vida sexual sana. Hay que decir que aparte del placer sexual, el hecho de masturbarse permite que cualquiera conozca mejor su propio cuerpo. De ese mayor auto conocimiento, se beneficiarán también las relaciones en pareja.

Para el hombre, la masturbación, además de ser una actividad placentera, puede ser una forma de aprender a controlar su eyaculación y disfrutar durante más tiempo si ese es su deseo.

Para la mujer, además de disfrutar de su sexualidad, favorece el auto conocimiento de las zonas más sensibles de su cuerpo y cómo excitarse. La antropóloga Margaret Mead descubrió que en las culturas en que la masturbación está permitida, y es parte aceptada de la sexualidad femenina, las mujeres tienen mucha más facilidad para alcanzar el orgasmo. La mujer que se masturba se siente satisfecha, conoce su cuerpo y aprende el ritmo que le gusta llevar, y podrá guiar después a su compañero y mejorar las relaciones de pareja.

Estar en contacto con la propia sexualidad, conocer tus ritmos y tiempos, hace a la persona sentirse más segura y relacionarse mejor con su cuerpo y con su pareja.

Con todo esto, no queremos decir que la masturbación sea mejor que un amante, o al menos no debería serlo, pues nada hay como la excitación y el erotismo que te da el contacto con otra piel.

Aspectos positivos de la masturbación:

 Es una actividad saludable. Una forma segura de no contraer riesgos.

 Es placentera.

 Conoces tu cuerpo.

 Permite que tú controles el ritmo de las caricias, de la excitación, del placer.

 Ayuda en los encuentros sexuales.

 Se puede practicar por ambos sexos.

 No necesitas tener pareja para disfrutar de tu sexualidad.

 Puede practicarse en pareja.

 Es relajante, elimina tensiones.

 Es económica.

 No es exigente.

 Facilita el sueño.

 Quita presión a tu pareja, que no es la única fuente de tus orgasmos.

A esta lista puedes seguir añadiendo tus propias ventajas.

Recuerda que para disfrutar de la sexualidad, en pareja o a solas, hay que tomarse su tiempo.



Fdo.: Raquel Díaz Illescas














































sábado, 12 de septiembre de 2009

La masturbación

 Las personas que están en contacto con su propia sexualidad tienen más confianza y son mejores amantes,


La masturbación ha estado presente en todos los períodos históricos, culturas y sociedades, en todas las edades y en ambos sexos; pero a pesar de la importante revolución sexual ocurrida en la segunda mitad del siglo XX en el mundo occidental, en cuanto a la concepción, a la moral sexual y al comportamiento sexual humano, la herencia de la cultura judeo cristiana, vive aún hoy en la conciencia de hombres y mujeres.

La masturbación ha venido siempre de la mano de lo sucio, oscuro, la inquietud, la culpa, los miedos y por supuesto relegando esta actividad al género masculino.

De la sexualidad, sin duda la masturbación se ha llevado la mayor parte de creencias y mitos, empezando por el reblandecimiento de la médula espinal, o que en el cerebro había una especie de compartimiento donde se encontraba todo el semen y que éste había que administrarlo muy bien, pues si se secaba, el señor en cuestión moría. Tremendo. Cuando se dieron cuenta de que esto no sucedía, se sacaron un miedo más para controlar al personal: la masturbación provocaba la ceguera; pero parece ser que la sociedad no se llenaba de ciegos (aunque se pusieran ciegos), y les dio por los granitos, y vinieron entonces los dermatólogos a decir que estos estaban producidos por las hormonas, la grasa y esas cosas. La pérdida de control bajo las sábanas, llevó a algunos iluminados a buscarle nuevos efectos, esta vez los psicológicos, la locura, aquello de ser una actividad propia de salidos, viciosos, etc. etc. porque claro en esto de darse gusto al cuerpo, las mujeres estaban excluidas. Estas no tenían deseos sexuales, por lo tanto, tampoco necesidad de saciar nada.

Aunque muchas de estas creencias parezcan propias de otro tiempo, sin embargo siguen vivas en el pensamiento de algunas personas; afortunadamente gracias a ese profundo cambio surgido en nuestra sociedad, devolvió a las mujeres aquello que durante siglos se le había negado: la masturbación, el disfrute de su cuerpo.

Es verdad que en pleno siglo XXI, no todas las mujeres manifiestan sin sonrojarse, que ellas también disfrutan de su sexualidad a solas; y tanto hombres como mujeres, dosifican esta práctica, por otra parte tan saludable, pues siguen pensando, erróneamente, que la masturbación es un recurso para quienes no tienen pareja. Esto va cambiando, es cierto, pues la masturbación no está relacionada con tener o no pareja, sino con el propio deseo que uno quiera experimentar en cada momento, sin por ello dejar de querer y desear a su pareja.

La prestigiosa revista The Lancet propuso que, en esta época del sida, masturbarse sería como hacer el amor con una sola persona cuya historia sexual es perfecta y realmente conocida.

En Grecia, Diógenes se masturbaba en público riéndose de que así se habría evitado la guerra de Troya.

También Woody Allen, utiliza una frase a tener en cuenta: es como hacer el amor con la única persona que amamos verdaderamente.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Problemas sexuales en la infancia y en la adolescencia

24 de agosto de 2009. UIMP. Santander.


“Me piden que hable de los problemas de la sexualidad en los adolescentes, pero no olvidéis que la sexualidad es un enfoque positivo”.
En su clase magistral, Félix López nos habló de la importante decisión que es dar vida a otro ser humano; los riesgos que puede conllevarle al niñ@ el no ser desead@; cómo inciden los estilos de apego durante los primeros años de vida, y durante toda la infancia, y cómo estos condicionarán en un futuro, sus relaciones afectivo amorosas; los abusos sexuales, los problemas de identidad de género, etc.

La educación sexofobica decía Félix, creará en el/la niñ@ miedos, viviendo su sexualidad como algo sucio, con culpa, con una moral represiva. Es importante que l@s niñ@s reciban una educación sexofilica, que les permita vivir su sexualidad de manera placentera, sin miedos ni sentimientos de culpa.

Como decía el ponente, “los problemas parecen muchos, pero la mayoría de la población está sana y puede disfrutar de una vida sexual-amorosa”.
Félix López nos propone un modelo biográfico profesional, en el que cada cual cree su propia biografía sexual amorosa, con sus decisiones, conocimientos, y evaluación.

Quienes somos amantes de las letras, como lo somos de la sexualidad afectivo amorosa, debemos irremediablemente, querer y admirar a Félix López.

Asistir a los cursos de verano en la UIMP de Santander, no solo significa formación y enriquecimiento intelectual, la UIMP de Santander, es un descubrimiento constante de personas interesantes; es el reencuentro con personas estupendas, a las que siempre que buscas encuentras, a las que quieres y admiras, y a las que consideras amig@s.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.
 
A finales del mes de agosto, como cada verano, he asistido a la UIMP (Universidad Internacional Menéndez Pelayo) de Santander, a participar de uno de sus excelentes cursos que programa cada año esta universidad. Los problemas de la psicología infanto juvenil, ha sido el curso en el que me matriculé este año. Las drogas, el abuso de poder en la escuela, la violencia juvenil, las adicciones a Internet, los niños superdotados, los problemas sexuales en la infancia y adolescencia…, son algunos de los temas tratados a lo largo de la semana. Como no puedo hablar de todas las ponencias, lo haré de una de ellas, pues de manera especial admiro a su ponente. Con estas inteligentes palabras, abrió su charla Félix López::