martes, 24 de abril de 2012

¿Qué hacer ante el bajo deseo sexual? (I)

El sexo es innato, pero la sexualidad se aprende.

La inapetencia sexual, el no tener ganas o incluso no querer o poder mantener relaciones sexuales con la pareja, hemos visto cómo lleva a sus miembros a percibirse desde el distanciamiento, no dejando lugar a la afectividad ni a la intimidad que tanto precisan quienes comparten un proyecto de vida.

Muchas veces el problema se hace crónico y se queda instalado demasiado tiempo en la vida de la pareja sin que ninguno de ellos sepa muy bien qué hacer para darle una solución. A veces precipitadamente, uno de los miembros decide tomar decisiones que acaban de manera drástica con lo que ellos perciben como que no tiene solución.

Y es que a veces la clave está simplemente en respetar los tiempos, los ritmos, las ideas, aprendizajes culturales o los deseos y preferencias de cada cual. Aprender a comunicarse sin miedos ni cortapisas con la lengua, facilita que nos entiendan, aunque no necesariamente tengan por qué compartir lo que pensamos o sentimos, puesto que este no debe ser el objetivo.

Y es que, a veces, olvidarse de lo que solo nosotros deseamos no es fácil, pero hacerlo nos acerca y nos hace entender.

El tratamiento de la inapetencia sexual se debe dirigir hacia los factores que pueden estar reduciendo el interés sexual y que con frecuencia pueden presentarse en el proceso.

La actuación consiguiente no es homogénea para todas las parejas, aunque el motivo por el que se acude a un profesional sea el mismo: Algunas parejas necesitarán un abordaje y trabajo de su relación o terapia de pareja antes de centrarse en el incremento de la actividad sexual, aunque erróneamente en demasiadas ocasiones, para la parte de la pareja que se siente más “perjudicada” su objetivo principal sea precisamente este. Asimismo, otras parejas necesitarán que se les enseñe a resolver conflictos y diferencias en aquellas áreas no relacionadas con el sexo, como comunicarse de manera asertiva.

Aprender a comunicarse de manera asertiva, forma parte de la terapia de pareja, ya que en un alto porcentaje de las parejas en las que a uno de sus miembros su deseo sexual se ha ido enfriando o simplemente se ha ausentado desde hace tiempo, una de las causas que ha motivado esta inapetencia sexual ha sido precisamente la ausencia de comunicación entre sus miembros o una comunicación inadecuada.

Es verdad que el aspecto relacional o de comunicación se ve más afectado en las mujeres que en los hombres. Porcentualmente es mayor el número de mujeres que manifiestan insatisfacción con su pareja por no sentirse entendidas, escuchadas, valoradas o por no mantener una comunicación fluida con su pareja en el día a día. Para muchas mujeres la sexualidad debe pasar por un acercamiento desde la afectividad que no siempre desean que sea la antesala al coito sino a caricias, besos, cogerse la mano o simplemente sentirse cerca.

Es indiscutible que los tiempos y ritmos de hombres y mujeres son distintos cuando se trata de mantener relaciones sexuales. Ellos son más directos, quieren sexo y van directamente, sin preámbulos ni cortejos y a veces cuando creen hacerlo se equivocan en las formas. Para ellos mantener relaciones pasa inexcusablemente por el coito y por supuesto, el orgasmo y la eyaculación. Ellas, muchas veces no es que no quieran o no les guste el sexo, simplemente es que “antes les apetece un aperitivo”, seducir, ser seducidas, jugar, sin que sexo sea sinónimo de coito ni siquiera de orgasmo. La sexualidad para las mujeres es una vivencia integral en la que intervienen muchos factores. Y si esto es así ¿Por qué unos y otras se quejan de no haber entendimiento? Por algo muy simple: no hay comunicación.

Seguiremos...

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

martes, 17 de abril de 2012

Causas de la inapetencia sexual: más factores (y IV)

Como ya venimos viendo en anteriores post, las causas del bajo deseo sexual en las mujeres pueden ser muy diversas, como lo es la historia de vida de cada una de ellas. Es por eso que no debemos caer en las generalizaciones y si en un análisis individualizado de cada caso.
Otros factores que son causa de la inapetencia sexual son:

 Utilización de técnicas sexuales que producen desagrado, asco o enojo: el expresar lo que nos gusta o disgusta facilita unas relaciones sexuales placenteras. Muchas mujeres sienten corte o vergüenza de expresar a su pareja sus deseos y preferencias sexuales. Así mismo tampoco informan de aquellas prácticas sexuales que no les satisfacen y optan por callarse dejando paso a la inapetencia sexual.

 Peligros respecto del placer sexual: forman parte de los mitos y creencias que llevan a vivir la sexualidad y el placer con miedos (miedo a abandonarse y no ser capaz de controlarlo, a que le guste tanto que se convierta en una “viciosa”) Si aprendemos a vivir la sexualidad desde una posición erotofílica (actitud positiva) no veremos en nuestra erótica la sombra del pecado sino una posibilidad de disfrutar y hacer gozar también a nuestra pareja.

 Sentirse cuidada: la persona que se siente cuidada, se siente bien y en armonía con su pareja. Es importante saber no solo ser amante entre las sábanas; también cuando la pareja necesita cuidados específicos es esencial mantenerse cerca. Si esto no se da, el deseo sexual se irá ausentando en silencio.

 El aburrimiento sexual: Juega un importante papel en las relaciones sexuales de las parejas que llevan mucho tiempo juntos; éstas acaban siendo rutinarias y poco creativas. Ambos saben lo que vendrá después de cada gesto o caricia. No hay sorpresas, juegos o novedades que conviertan los encuentros sexuales en experiencias gratificantes.

El deseo sexual en la pareja no tiene fecha de caducidad. El deseo puede mantenerse intacto toda la vida. Lo que tiene fecha de caducidad es el enamoramiento, que corresponde a una fase muy especial del deseo erótico. El desequilibrio hormonal sexual es tan alto y tan intenso que la relación se vive sin obstáculos, con mucha fuerza y con la sensación de que el sexo fluye de manera natural, sin forzar nada. Afortunadamente, este estado no dura más de año y medio. Luego, puede mantenerse un poco más y después, deja paso al deseo voluntario, que se mantiene durante toda la vida y en el que cada cual deberá ocuparse para que se mantenga activo y estable.

La reiteración y rutinas en conductas y hábitos sexuales pueden llevar al cansancio y aburrimiento haciendo disminuir el deseo, bien de forma selectiva (el deseo se mantiene con otras personas ajenas a la pareja) bien de forma absoluta (tampoco existe deseo hacía personas ajenas a la pareja).

El papel que se asigna a los hombres y a las mujeres en las relaciones sexuales es producto de una inadecuada educación sexual que contribuye a conductas estereotipadas en lo que se refiere a tomar la iniciativa en los encuentros sexuales. Una vez más son ellos quienes deben comenzar el acto sexual y son las mujeres las que deben esperar o rechazar. Esto acaba siendo el germen de encuentros sexuales poco creativos y carentes de novedad.

Los cambios de roles son necesarios para que la pareja sea capaz de evolucionar erótica y afectivamente en su relación. Es importante que ambos miembros sean capaces de tomar la iniciativa y sorprender al otro.

En cualquier caso es interesante que la pareja analice y se pregunte cómo son sus relaciones sexuales, qué tipo de juegos llevan a cabo, cómo se acarician, cómo es su comunicación sexual, si expresan lo que les gusta o lo que no, sus preferencias, si disfrutan de sus encuentros eróticos sexuales, etc. No se trata de buscar culpables sino soluciones.

Hay que tener presente, que el deseo sexual inhibido sólo debe ser considerado un problema cuando la falta de interés sexual no es una opción voluntaria, sino un foco de malestar personal o en la relación de pareja. Es verdad que en un alto porcentaje de las ocasiones el problema que manifiestan las mujeres no es porque su inapetencia sexual les preocupe a nivel individual, sino por los conflictos que esta le causa con su pareja.

Romper con las rutinas sexuales es una de las tareas más complicadas. Los comportamientos habituales que muchas veces se establecen en los encuentros amorosos, resultan difíciles de cambiar, aunque no sean del todo satisfactorios. Los masajes, aceites, olores, luces, lugares nuevos, ropa íntima, y todo lo que consiga el disfrute de nuestra pareja, y el nuestro, podría ser un buen comienzo. No olvidemos que las reglas en la cama las ponen las personas implicadas, por lo tanto no hay nada establecido; de hecho el problema es precisamente caer en hacer siempre lo mismo.

No es necesaria la búsqueda de afrodisíacos, ya que el mayor estimulante es nuestra propia imaginación.

Dejar a un lado miedos, temores, ideas irracionales y moralistas sobre la sexualidad, nos puede llevar a experimentar y disfrutar de nuestra sexualidad, dejando que la respuesta sexual siga su curso.


(El anterior a este: pincha en el enlace)

Causas de la inapetencia sexual: otros factores (III)

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

viernes, 13 de abril de 2012

ENCUESTA PARA ELLAS: La masturbación femenina…

ENCUESTA PARA ELLAS: La masturbación femenina
Para aquellas que os quedasteis con ganas de participar en el primer cuestionario de preguntas abiertas  que lancé a finales de año en la red (unas porque os dio pereza y otras por falta de tiempo) el caso es que muchas sois las que me habéis manifestado vuestro deseo de participar, pero que os lo pusiera más fácil. ¡Pues ahí lo tenéis chicas¡ Una nueva encuesta que se puede responder en un “plis plas”  Cada semana intentaré lanzar una diferente y de un tema especifico, espero seducirte lo suficiente para que quieras volver.

Como ves cada pregunta está seguida de varias opciones, puedes marcar tantas como correspondan a tu experiencia.
Para responder a la misma, debes pinchar en la imagen o en el enlace que muestro al final de este post.
Así mismo te dejo el enlace del primer cuestionario por si te animas. Te aseguro que resulta muy interesante de responder….

      1. Sexo / Edad/ Localidad

 Heterosexual
 Lesbiana
     Bisexual
     Transexual

 Tengo diversidad funcional (una discapacidad)

 Edad: entre 18 y 25 años

Entre 25 y 35

Entre 35 y 45

Entre 45 y 55

Entre 55 y 65

 Más de 65

 Vivo en España

 En el Norte

En el Sur

En el Centro

En el Este

En el Oeste

No vivo en España

Soy creyente

Soy creyente y practicante

No soy creyente
  
      2. Niivel de estudios

 Básicos

 FP

Bachillerato

Diplomada

 Licenciada

Doctorada

Sigo formándome

Trabajo y estudio

 3.  ¿A qué te dedicas?

Funcionaria

Sector servicios (hostelería, comercio, limpieza...)

Sanidad (enfermera, medico, psicóloga, sexóloga, psiquiatra, logopeda...)

Servicios sociales (educadora social, trabajadora social, auxiliar de ayuda a domicilio, terapeuta ocupacional)

Ejecutiva

Arte (escultora, pintora, artesana, cantante, actriz, directora de cine)

Deportista

Educación

Turismo

Medio ambiente

Profesión liberal (abogada, ingeniera, arquitecta, aparejadora, empresaria...)

Prostituta (en la calle)

Prostituta (Scort)

Cantante

Informática

Estudiante

Empleada de hogar

En paro

Jubilada

Pensionista

Voluntaria

ONG

 4. Situación afectiva sexual en este momento

Soltera

Casada

Casada por segunda o tercera vez

Separada/divorciada

En proceso de separación

Viuda

Con pareja estable

Con rollos esporádicos

Con amante

He ido alguna vez con un gigoló

Habitualmente solicito los servicios de un gigoló

Con hijos

Tengo pareja pero me gusta "golfear" aquí y allá

Vivo con mis padres

Comparto piso con otra persona

Mi pareja me es infiel en este momento

Estoy buscando pareja

Me gustaría cambiar mi situación afectiva
       
   5. Algunos aspectos de tu persona

Mido menos de 1.65 cm

Mido más de 1.65 cm

Me depilo y/o uso cremas para el cuidado corporal o facial

Llevo depilado el pubis

Visto clásica

Visto estilo moderno

Visto hippy

Me gustan y llevo piercing y/o tatuajes

Uso perfume habitualmente

No me preocupo por mi imagen personal

Me gusta mi cuerpo

No me gusta mi cuerpo

Hago deporte

Actualmente estoy haciendo dieta para perder peso

Fumo

Bebo alcohol los fines de semana

Bebo alcohol todos los días

No bebo alcohol

Tomo sustancias (cocaína, pastillas de diseño, porros, etc)

Además del español, hablo inglés

Soy buena conversadora

Me considero seductora

Soy tímida

Soy celosa

Me gusta la noche

Me gusta bailar

Soy tierna, detallista, cariñosa…

Me considero atractiva

Soy un poco "malota"

Tengo éxito con los hombres

No tengo éxito con los hombres

Tengo éxito con las mujeres

He mantenido relaciones sexuales con personas con diversidad funcional (discapacidad)

No me fijo en una persona con diversidad funcional (no me interesa)

Me gusta tomar la iniciativa en el sexo

He sido alguna vez infiel

Actualmente soy infiel

Perdonaría una infidelidad

No perdonaría una infidelidad

He mantenido relaciones sexuales con otra mujer

He participado en tríos

Mis parejas sexuales deben usar preservativo.

Tomo la píldora

Tengo hecha la ligadura de trompas

No utilizo ningún método anticonceptivo

Otros métodos
                                
6. Masturbación: Edad de inicio

Antes de los 10 años

Entre los 10 y los 18 años
Entre los 18 y los 25 años
Entre los 25 y los 35 años
Entre los 35 y los 45 años
Después de los 45 años
Nunca me he masturbado

Hablo de la masturbación con mis amigas
No hablo de la masturbación con mis amigas
Hablo de la masturbación con mi pareja
No hablo de la masturbación con mi pareja
Mi madre me habló de la masturbación en la adolescencia/juventud
  
      7. Masturbación: Frecuencia

Me masturbo todos los días
Dos o tres veces por semana
Una vez a la semana
Cada quince días
Cuando me acuerdo
Cuando estoy estresada
Cuando no tengo pareja
Cuando tengo pareja también me masturbo
Cuando me encuentro excitada
Cuando estoy nerviosa
No sé masturbarme
Las mujeres que se masturban son un  poco “guarrillas”

 Pienso que las mujeres nos masturbamos menos  que los hombres
 Las mujeres nos masturbamos igual que los hombres
Me gusta masturbarme
 Después de masturbarme me siento culpable
  Hablar de la masturbación me produce vergüenza
 Si me masturbo tengo menos ganas de practicar relaciones sexuales
Masturbarme no me influye en las ganas de mantener luego relaciones sexuales con mi pareja
  
Paara ver toda la encuesta y poder responderla, pincha el enlace de más abajo
  
                
     
         Cuestionario de preguntas abbiertas


Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

martes, 10 de abril de 2012

Causas de la inapetencia sexual: varios factores (III)

La calidad de la relación de pareja influye mucho, sin duda, en la presencia del deseo. Este puede disminuir temporalmente e incluso mantenerse en el tiempo, en uno de los miembros, cuando las experiencias sexuales dejan de ser satisfactorias. La comunicación juega un papel esencial en la vida afectiva y sexual de la pareja que permite a sus miembros conocer sus gustos y preferencias entre las sábanas; sin embargo, el uso que hacen de la comunicación los amantes suele ser pobre.
Y así, el deseo sexual ha de verse con relación a varios factores, a tener en cuenta, entre otros, los siguientes:
  • El temor al fracaso con la pareja: las ideas adquiridas a edades tempranas acerca de lo que es deseable en una relación de pareja acaban generando en la persona sentimientos de culpa ante su bajo deseo, y la consiguiente presión para mantener relaciones sexuales. Esto suele ser una causa frecuente de ansiedad, que termina por minar el deseo de muchos hombres y mujeres.
  • Ausencia de fantasías sexuales: las fantasías sexuales son un recurso o herramienta fundamental en la sexualidad, solos o en pareja. Las fantasías sexuales ayudan a la persona a abandonarse a su placer, y al mismo tiempo contribuyen a un enriquecimiento de las relaciones sexuales.
  • deas negativas respecto del placer sexual: la educación sexual recibida será clave en la vivencia de la sexualidad. Si se entiende el placer desde la moral como algo pecaminoso, con culpa o miedos, las relaciones sexuales no se vivirán de forma satisfactoria.
  • Pensamientos negativos de nuestra pareja sexual: no podemos desear algo que percibimos como negativo, ya que interiormente sentiremos rechazo hacia esa persona. De manera que si los pensamientos que tenemos hacía nuestra pareja son negativos, difícilmente desearemos compartir fluidos con ella.
  • Vivencia insatisfactoria de la conducta sexual: si no disfrutamos de nuestros encuentros sexuales, no desearemos volver a repetirlos. Es necesario que nos lo pasemos bien en la cama para querer repetir.
  • La masturbación: es una actividad saludable, cuando estamos solos o cuando vivimos en pareja. Si no conocemos nuestro cuerpo no seremos capaces de disfrutar de él, ni solos ni acompañados; así mismo tampoco sabremos guiar las manos de nuestro compañero sexual.
  •  Relaciones sexuales sin ganas: acaban siendo relaciones por débito, compromiso o por miedo a la pérdida de algo, lo que no favorece relaciones sexuales placenteras para ninguno de sus miembros.
  • Posibilidad de que la pareja no nos guste sexualmente: los años de convivencia llevan a algunas personas al abandono de su imagen personal, y la consiguiente falta de deseo de uno de sus miembros. Si tu pareja no te gusta físicamente, si no te “pone”, el deseo sexual se ausenta. Es importante mantener una imagen corporal agradable a los sentidos, a todos, pues esto facilitará que el deseo se mantenga activo. Ser buena persona y trabajadora está muy bien, pero si además tu imagen resulta apetecible, mejor que mejor.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

martes, 3 de abril de 2012

Causas de la inapetencia sexual: las psicológicas y las sociales. (II).




Causas psicológicas: Cuando las causas físicas han sido descartadas podemos encontrarnos con trastornos del deseo sexual por inhibición psicógena, que son el resultado de la supresión involuntaria e inconsciente, pero activa, del deseo sexual como mecanismo de defensa frente a la angustia, motivado por:

- vivencias pasadas o actuales
- preocupación excesiva por complacer a la pareja
- la repetición de experiencias sexuales ingratas
- insistencia sexual obsesiva por parte de la pareja
- sentimientos de culpa leve
- normas morales prohibitivas o similares
- miedo a la intimidad
- conflictos de Edipo, fraternales, etc.

Las emociones de miedo, vergüenza, culpa, asociadas al deseo sexual producen angustia. Si las causas psíquicas son de carácter grave o profundo, la disfunción deberá ser tratada con psicoterapia por un profesional de la Psicología. Cuando las causas psíquicas son leves y están asociadas a causas sociales, pueden ser abordadas por la orientación y la terapia sexual.

La mayor parte de las causas psíquicas están asociadas al miedo a desear sexualmente, porque este deseo es vivido como un peligro, así la defensa se establecerá no deseando.

A continuación enumeramos una lista de posibles peligros (creadores de miedo) asociados a la sexualidad:

- Miedo al embarazo
- Miedo al descontrol
- Miedo a que el sexo te domine (pérdida de control)
- Miedo al compromiso
- Miedo al fracaso
- Miedo a daños físicos
- Miedo al placer
- Miedo ante una disfunción sexual

Causas sociales: Son las causas generadas por influencias culturales, como una educación represiva, la influencia de modelos sexuales sociales puritanos, relaciones sexuales clásicas y pobres, los comportamientos de género, etc.

Las experiencias sexuales no satisfactorias y vividas sin placer, provocan una respuesta de falta de deseo o disminución de este para llevar a cabo encuentros sexuales deseados. Su origen: en la mayoría de las ocasiones una falta de comunicación entre la pareja, comunicación inadecuada o falta de aceptación en las propias prácticas sexuales o utilización de técnicas que producen desagrado, asco o enojo.

Así mismo las relaciones sexuales sin ganas, bien por compromiso o por miedo a la pérdida de la pareja, cuando se producen de forma reiterada, son también causa de falta de deseo ya que la vivencia de la sexualidad para que sea placentera y pueda reforzar el deseo de repetir la experiencia ha de ser previamente deseada y recordada con placer.

Los conflictos de pareja son otras de las causas de la inapetencia sexual, principalmente de las mujeres. La falta de deseo suele ser una respuesta a los problemas afectivos y de convivencia. Si no estás bien con tu pareja, si no te sientes valorada, querida, cuidada y apreciada, difícilmente el deseo encontrará acomodo.

Seguiremos...

Fdo.: Raquel Díaz Illescas

lunes, 2 de abril de 2012

ENCUESTA. ELLOS ¿Qué les gusta a las mujeres entre las sábanas?

Pinch aquí para responder: ENCUESTA
Para los que les dio pereza y/o no encontraron tiempo para responder al primer cuestionario que lance a la red de preguntas abiertas, aquí os muestro una nueva encuesta que se puede responder en un “pis plas”

Como veis se cada pregunta está seguida de varias opciones, podéis marcar tantas como correspondan a vuestra experiencia.

Para responder a la misma, debéis pinchar en la imagen o en el enlace que muestro al final de este post.

1. Sexo / Edad/ Localidad
Hombre
Homosexual
Bisexual
Tengo diversidad funcional (una discapacidad)
Edad: entre 18 y 25 años
Entre 25 y 35
Entre 35 y 45
Entre 45 y 55
Entre 55 y 65
Más de 65
Vivo en España
En el Norte
En el Sur
En el Este
En el Oeste
En el Centro
Vivo fuera de España
Soy creyente
Soy creyente y practicante
No soy creyente
Otro (especifica)

2. Nivel de estudios
Básicos
FP
Bachillerato
Diplomado
Licenciado

Doctorado
Sigo formándome
Trabajo y estudio
Sin estudios básicos.

3. ¿A qué te dedicas?
Funcionario
Sector servicios (hostelería, comercio...)
Sanidad (enfermero, medico, psicólogo, sexólogo, psiquiatra, logopeda...)
Servicios sociales (educador social, trabajador social, auxiliar de ayuda a domicilio, terapeuta ocupacional)
Educación
Política
Turismo
Medio Ambiente
Profesión liberal (abogado, ingeniero, arquitecto, aparejador, empresario...)
Periodista
Informático
Estudiante
Empleado de hogar
En paro
Pensionista
Voluntario
Otros.
Otro (especifica)

4. Situación afectiva sexual en este momento
Soltero
Casado
Casado por segunda o tercera vez
Separado/divorciado
En proceso de separación
Viudo
Con pareja estable
Con rollos esporádicos
Con amante
Usuario de prostíbulos
Con hijos
Tengo pareja pero me gusta "golfear" aquí y allá
Vivo con mis padres
Comparto piso con otra persona
Estoy buscando pareja
Me gustaría cambiar mi situación afectiva
Otro

5. Algunos aspectos de tu persona
Mido menos de 1.75cm
Más de 1.75 cm
Me depilo y/o uso cremas para el cuidado corporal o facial
Visto clásico
Visto estilo moderno
Visto hippy
Me gustan y llevo piercing y/o tatuajes
Uso perfume habitualmente
No me preocupo por mi imagen personal
Me gusta mi cuerpo
Hago deporte
Fumo
Además del español, hablo inglés
Soy buen conversador
Soy tímido
Celoso
Me gusta la noche
Me gusta bailar
Soy tierno, detallista, cariñoso…
Me considero atractivo
Soy un poco "canalla"
Tengo éxito con las mujeres
He mantenido relaciones sexuales con personas con diversidad funcional (discapacidad)
Me gusta tomar la iniciativa en el sexo
He sido alguna vez infiel
Actualmente soy infiel
Perdonaría una infidelidad
No perdonaría una infidelidad
Uso preservativo
No uso preservativo
He ido de prostitutas alguna vez
Voy habitualmente con prostitutas
Otro (especifica

6. ¿Cómo te gustan las mujeres sexualmente?
Inteligentes
Altas
Delgadas
Entradas en carnes
Que no fumen
Sensuales, apasionadas, seductoras

Golfas, canallas...
Activas, que tomen la iniciativa
Que me digan palabras guarras cuando practicamos sexo
Tiernas, cariñosas, sensibles...
Con sentido del humor
Sumisas, que dejen que sea el hombre quien tome la iniciativa
Con pechos grandes
Un buen culo
Depilado el pubis
No me importa el físico
Si no me gusta físicamente, no me acuesto con ella
La diversidad funcional (discapacidad) no resulta un impedimento para que una mujer me guste sexualmente
Me enamoro con facilidad
Me gustan las mujeres que me cuesta conquistar
Otro (especifique)

La encuesta sigue y puedes responderla en:
ENCUESTA. ELLOS:¿Qué les gusta a las mujeres entre las sábanas?


Si tienes tiempo y te apetece, el cuestionario con respuestas abiertas sigue abierto en la red:

CUESTIONARIO PARA ELLOS: respuestas abiertas

Fdo.: Raquel Díaz Illescas