Un importante porcentaje de las disfunciones sexuales masculinas que llegan a la consulta, son producto de la cultura de los géneros, de la que ambos sexos han integrado y asumido su rol en sus relaciones afectivas sexuales.
Las mujeres esperan que sean ellos quienes les proporcionen su placer y les descubran los secretos de su anatomía. Ellos, fieles a lo que se espera de su condición varonil, hacen culto a su pene, preocupándose en exceso de su “estado anímico” y asumiendo el rol del explorador sexual.
Y es que el hombre cuando piensa en hacer disfrutar a su pareja, en lo primero que se fija es en la resistencia, tamaño y erección de su pene, olvidándose de la totalidad de su cuerpo: boca, nariz, dedos, manos, pies, lengua (la húmeda y la que se escucha)… Y esto es así porque aunque escribamos artículos al respecto y muchas mujeres han manifestado dónde se encuentra ubicado su placer, ellos insisten en centrar los encuentros amorosos en el coito (sin duda altamente placentero para ellos...) a pesar de los resultados.
Si hacer protagonista al coito de los encuentros sexuales sirviera para que algunos hombres no tuvieran disfunciones sexuales, y además no se frustrasen y sufrieran por las mismas, posiblemente la sexualidad quedaría reducida al sexo, algo mecánico, universal y que todos sabríamos hacer. Pero la sexualidad es otra cosa, que se aprende y que además puede ser diferente en cada sociedad o persona, que no se limita al coito, sino que hace de los encuentros sexuales una vivencia integral de todo el cuerpo. Y es por esto por lo que propongo a los señores y caballeros todos, algunos propósitos que les harán disfrutar más y mejor de su sexualidad y por supuesto, con su pareja:
1. Aprenderé a desprenderme de mis prejuicios sexuales.
2. El clítoris es un órgano exclusivamente para el placer, me acercaré, me presentaré y si me lo permites lo mimaré tanto como me pidas...
3. Si mi pene pierde la erección, tendré recursos para seguir disfrutando de nuestro encuentro sexual.
4. Si eyaculo antes de que hayas tenido tu orgasmo, seguiré acariciándote, chupándote y lamiéndote...
5. Me preocuparé en disfrutar no para ti, sino junto a ti.
6. No me sentiré un vicioso o un pervertido por desear mantener relaciones sexuales contigo todos los días.
7. Me masturbaré cuando lo desee sin sentirme culpable.
8. Aprenderé a vivir nuestras relaciones sexuales sin imposiciones ni obligaciones maritales.
9. Respetaré tu deseo sexual.
10. Reforzaré tus conductas positivas.
11. Sustituiré en mi vocabulario los “siempre, nunca, jamás, todo o nada por algunas veces, en ocasiones...”
12. Tomaremos decisiones juntos.
13. Eyacular no es lo más importante.
14. Aceptaré que no siempre estoy dispuesto.
15. Si sufro ante la ejecución en los encuentros sexuales, buscaré las soluciones, no el problema.
16. Me emocionaré sin disimularlo.
17. Mantendré relaciones sexuales aunque solo tengamos caricias y besos.
18. Te abrazaré antes y después.
19. Te diré lo mucho que te quiero tantas veces como lo sienta o piense…
20. Querré y aceptaré a mi pene tal cual es: grande, pequeño, delgado, grueso, resistente, fuerte, impulsivo...... es mi pene. Es el que tengo y me puede dar, si yo se lo permito, todo el placer que necesito.
Seguro que se te ocurren muchos más propósitos que mejorarían la vivencia de tu sexualidad. Si te animas, continúa esta lista, pero no te olvides de llevarla a la práctica.
Fdo.: Raquel Díaz Illescas.
Si la sexualidad es sinónimo de placer ¿Qué hace que no sea esto lo que sienten algunas personas cuando la practican?; ¿Qué influencia tiene la educación recibida, los modelos sexuales? Para que la sexualidad sea gratificante, ¿qué lugar ocupa el coito?. En este blog, que he llamado “sexualidad positiva”, vamos a ir deslizándonos, con caricias, besos, lametones, y aquello que nos haga sentir bien, en una sexualidad placentera, en una sexualidad positiva….
Próximos cursos, Talleres, Jormadas o Congresos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Me encanta el listado que has hecho. Los hombres piensan demasiado en la penetración, cuando en realidad el 90% del sexo no tiene nada que ver con la penetración.
maravilloso blog y maravillosa entrada...procurare seguir estos maravillosos consejos
un abrazo
Publicar un comentario