Lo que soy, quien soy, es fruto de mis vivencias, del aprendizaje
adquirido, de mi capacidad de resiliencia, de mis muchas veces rebeldía,
inconformismo, de mis errores y también de mis aciertos, de las personas que he
conocido, las que han creído en mí, me han respetado y valorado, las que me han
amado y querido, de las personas a las que he amado y a las que amo.
Y me he quedado con lo mejor, de aquellas que me han herido o ignorado.
Gracias a ellas me he hecho fuerte y mi dignidad ha crecido conmigo, con mis
años, que ya son unos cuantos… pero estupendos!
La persona que soy hoy, ha aprendido a quererse y vivir cada día
intensamente, Respetándome y aceptándome sin ser mi juez y ejecutor.
Me permito llorar cuando lo necesito y también sentirme triste e incluso
ser políticamente incorrecta en algunos momentos. Pero sobre todo he aprendido
a mirar hacia delante, a caminar y saber descansar.
He aprendido a vivir sin lastres ni culpas que no me permitan disfrutar
de cada momento, de cada persona.
He aprendido amar, pero sobre todo he aprendido a saber cómo necesito y
quiero que me amen.
He aprendido a fantasear y vivir
realidades, a entender que no podemos quitarle años a nuestra vida, pero que si
podemos darle mucha vida a nuestros años y eso es en lo que estoy y lo que
llevo en mi mochila: Mucha vida para seguir dándole a mis muchos años que
espero seguir cumpliendo.
Y tú ¿Quieres compartirla conmigo?
Fdo.: Raquel Díaz
Illescas