jueves, 29 de septiembre de 2016

Receta sencilla para que te olviden




Si eres de los que te gusta el riesgo y las emociones fuertes, aquí te dejo una receta en la que seguro podrás experimentar emociones intensas, o quizá eres de los que pasan por la vida sin mirar al otro, si eres de esos/as, esta receta no es para ti.

Dificultad:

Sencilla. Incluso si alteras los ingredientes obtendrás el mismo resultado.

Tiempo de preparación:

Esta receta se va elaborando a fuego lento, pero los resultados los irás experimentando en menos tiempo del que quizá esperes o acabes deseando.
Lo interesante de esta receta es que conforme vas aplicando los ingredientes puedes ir sintiendo los efectos de la misma.

Ingredientes:

Dias de silencio.
Noches de ausencia.
Palabras vacías.
Momentos de Indiferencia.
Engaños recurrentes.
Presencia con ausencia.
Gestos sin afecto y
Deseo en la estantería.
Sexo bajo cero.

Modo de preparación:

Por separado, combinados o todos a la vez, con estos sencillos pero potentes ingredientes conseguirás que te olviden, no sé si deliciosamente, pero estarás preparando la combinación perfecta para pasar a la lista de los/as que no interesan. Y todo esto sucederá antes de lo que esperas.

Lo mejor de todo es que tú mismo/a serás quien deguste y repose lo preparado. Tranquilo que tendrás tiempo.

Advertencia: una vez los ingredientes están activados pararlos no siempre es posible, de manera que asegúrate que es esa la receta que deseas comerte. 

Efectos emocionales: tristeza y soledad.

Si juegas a olvidar, quizá consigas que te olviden.


Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

sábado, 17 de septiembre de 2016

Ellas son personas seductoras



Hay personas que  nos gustan, nos ponen y/o nos dan morbo.
 
Hay personas que activan nuestra fantasía e imaginación y nos hacen soñar incluso dormidos.
Hay personas que deseamos,  y desearíamos follar su mente y su cuerpo también.

Hay personas que nos conquistan, cautivan, enamoran, embrujan y por las que nos sentimos atraídos.

Hay personas por las que desearíamos perdernos en cada una de sus frases y palabras y de las que desearíamos comernos todas sus vocales y consonantes, para  adentrarnos en sus silencios. 

Hay personas con las que enmudecemos cuando nos hablan, cuando nos miran, nos sonríen  y  las vemos caminar. 

Hay personas enigmáticas y  misteriosas, que consiguen impregnar el aire de interrogantes.

Hay personas que nos descolocan, nos paralizan, nos despistan, nos sorprenden, nos transmiten serenidad y también nos ponen nerviosos/as.

Hay personas que abren la puerta de nuestra autoestima, que nos escuchan y ven en nosotros lo que nadie antes vio. 

Hay personas a quienes interesamos, que nos generan simpatía,  admiración  e incluso confianza.

Hay personas con las que las emociones se sienten libres, con las que no hay perchas donde colgar etiquetas, hay personas que nos aceptan sin más.

Hay personas que nos dicen sin temor: “Tú me interesas ¿te intereso yo?”

Hay personas que abren expectativas y llenan los momentos de posibles.

Hay personas que nos hacen sentir importantes y especiales cuando estamos a su lado.

Hay personas con las que  desearíamos caminar sin importar el dónde.  

Y en tu vida ¿Hay estas personas? Si las hay, házselo saber.

Fdo.: Raquel Díaz Illescas.

jueves, 15 de septiembre de 2016

10 tips a tener en cuenta para navegar en las redes sociales: vínculos afectivo-sexuales



Las redes sociales se han convertido en un recurso  al uso para generar vínculos amorosos y/o sexuales.

Hay muchas personas que están o se sienten solas, aún cuando están acompañadas. La red se convierte en un medio para escapar de esa soledad o ausencia de afectos y/o sexo y se adentran a la a veces complicada aventura de navegar en aguas no siempre experimentadas.    Lo cierto es que como en cualquier otra disciplina requiere de habilidades para navegar en el medio y sobre todo entender que nosotros no vamos a cambiar el funcionamiento del mismo, aunque podemos o no participar de este.

Vamos a ver algunos tips que debes tener en cuenta en tus interacciones en las redes sociales:

1.       Los vínculos que se generan son intensos, pero efímeros.  En poco tiempo, incluso horas, podrás desear estar con esa persona en cualquier sitio y situación, pero de la misma manera la intensidad irá descendiendo y esta volverá cobrar vida en otra nueva interacción. 

2.       La red necesita de grandes y potentes estímulos en las interacciones.  Si no tienes algo diferente en tu forma de comunicarte no  resultarás una persona atractiva e interesante de conocer. Aunque en la red hay para todos los gustos.

3.       Lo que tú quieres y lo que desea quien hay al otro lado no siempre coincidirá) sexo, amor, amistad…). Averígualo antes de seguir alimentando expectativas. 

4.       Son potentes activadores de la fantasía y de la imaginación, pero también lo son del desengaño y la frustración. Lo que tú mente imagina y crea es una cosa y la realidad normalmente será algo muy diferente. . 

5.       Te harán sentirte acompañada/o, pero también es un generador de vacíos y soledades. Cuando estén hablando contigo será estupendo, pero cuando veas que está conectado/a y no hay palabras para ti, el sentimiento será diferente.

6.       La verdad es un concepto que se sitúa al margen de este tipo de comunicación.  Escucharás o leerás las excusas más rocambolescas que te puedas imaginar para justificar los motivos por los que no se ha podido conectar contigo, o por su lentitud en responder. Solo tienes que asumir que hay muchos peces en el mar y pocos son los que se conforman con uno, aunque seas un maravilloso delfín.

7.       Te harán sentir especial y sin duda lo serás, pero como otras tantas o tantos con los que estarán interactuando en ese mismo momento.

8.       Si decides que ha llegado el momento de mirar a los ojos a quien hay al otro lado, la estadística apunta a que será la primera y la última vez.  Quizá tú estés en ese margen que se da para la excepción.

9.       Si formas parte de “la excepción”,  cientos y  miles de peces siguen estando en el mar, tú no podrás hacer que esto cambie, o quizá si?.

10.   Si decides echarte a la mar, asegúrate de saber nadar y llevar un buen equipo para posibles emergencias. No dejes que el miedo a las olas o la tempestad te impidan disfrutar del tiempo que estés navegando. Hay cruceros que merece la pena vivir, a pesar de que acaben antes de lo que desearíamos.  


Fdo.: Raquel Diaz Illescas.

viernes, 9 de septiembre de 2016

Nos faltaron los posibles




Nos faltaron las palabras que vinculan y nos sobraron cortesías sin fundamento.

Nos faltaron desayunos y caricias en las manos y miradas a solas.

Nos sobraron tiempos ajenos y  nos faltaron los nuestros.

Nos sobraron distancias y nos faltaron encuentros sin tiempo.

Nos sobraron los silencios vacíos, las palabras escritas y los puntos suspensivos.  

Nos sobraron los “me da igual”, los “no importa” y todas las frases prestadas.

Nos sobraron pasados imperfectos  y nos faltó dibujar juntos futuros simples. 

Nos sobró cobardía y nos faltó ponerle nombre a los sentimientos.  

Nos sobraron lágrimas en soledad y nos faltaron abrazos con piel. 

Nos sobraron preguntas y nos faltaron respuestas. 

Nos sobraron te echos de menos y nos faltaron los demás.

Nos sobraron los problemas y nos faltaron soluciones.

Nos sobraron discursos imprudentes  y nos faltó escuchar al corazón.

Nos sobraron palabras valientes para decir adiós y nos faltó la valentía para decir te quiero.

Nos sobraron días sin palabras.

Nos sobraron los bloqueos y  nos faltaron las  llamadas.

Nos faltó darle voz al sentimiento y acallar la razón.

Nos sobraron los pronombres y nos faltaron conjunciones.

Nos sobraron imposibles y nos faltaron todos los posibles.

Nos sobraron proyectos a solas y nos faltaron sueños compartidos.

Nos sobraron tentaciones y nos faltaron decisiones.

Nos sobraron los miedos y nos faltó el coraje para caminar juntos.

Nos sobraba amor para alimentarnos, y demasiado maquillaje para ocultarlo.

Nos sobraba tanto y nos faltaba tanto que el amor se fue de no usarlo.


Fdo.: Raquel Diaz Illescas