El sexo no te abandonará si tú no quieres

El abandono se produce cuando dejamos de evocarlo, de pensarlo, hablarlo, practicarlo y desearlo…

Si quieres que el sexo no te abandone: 

Escucha y habla de sexo con tu pareja, con amigos y amigas. Lo importante es hablar, en persona o telefónicamente. 

Date permiso para disfrutar de los halagos. Hazlo tú también. 

Lee literatura erótica, visualiza películas con contenido erótico. 

Ponte ropa interior o  lencería que te hagan sentirte estupendo/a.

Cuida tu imagen. Siéntete una persona atractiva e interesante de conocer.

Sube el tono de tus labios, perfúmate. 

Mírate al espejo (preferentemente de cuerpo entero) y observa tu cuerpo desnudo o con ropa interior ¡hazlo en clave erótica! 

Ves al gimnasio o a nadar, disfruta con tu cuerpo  y observa  a los nadadores, resulta una imagen súper erotizante…

Camina con seguridad, pisando fuerte y dejando expresarse a tu cuerpo.

Cultiva tus fantasías sexuales, mastúrbate.

Y si tienes oportunidad provoca encuentros sexuales con alguien que te haga reir, te guste, desees, te ponga y lo paséis bien juntos…. ¡EROTIZATE!   

Fdo.: Raquel Díaz Illescas

Sentimientos estáticos

Los sentimientos  nacen, crecen, se transforman, se alteran, duermen, renacen, mueren y solo cuando mueren permanecen estáticos. 
 

Y vuelven a nacer nuevamente en otro tiempo, en otra piel,  con otra mirada, con más calma, con más miedos y siempre con esperanza…

Pero nunca son los mismos  sentimientos con los que un día amamos a otra piel, porque nosotros tampoco somos los mismos  y la mano que agarramos tampoco es la misma que un día soltamos.

Y los sentimientos van y vienen como las olas y se van  desdibujando en nuestra memoria como las olas del mar desdibujan los te quiero en la arena mojada.

Y no podemos guardar los sentimientos como guardamos los recuerdos. .  Un día nos damos cuenta que ya no nos pertenecen  y que solo podemos acudir a la memoria que maquilla con palabras sentimientos en pasado.

Los sentimientos se niegan a ser estáticos, aún cuando se sienten morir reclaman seguir viviendo.  

Fdo.: Raquel Díaz Illescas